martes, 25 de septiembre de 2012

Una imagen vale más que mil palabras


Hay imágenes que simplemente acompañan a un texto o a un diálogo, pero, también existen imágenes que hablan por sí solas. Estas últimas, son un gran instrumento que ofrece enormes posibilidades en la enseñanza de una lengua.

Conocer un nuevo vocabulario puede ser más efectivo, comprender una regla gramatical más sencillo, el significado de una palabra, un contenido cultural, etc. El profesor ahorra tiempo en sus explicaciones, que en ocasiones se hacen demasiado largas y terminan por desmotivar y aburrir  a los estudiantes.

Las imágenes, pueden además ser muy bien aprovechadas para la práctica o el desarrollo de las destrezas comunicativas ya que fomentan la creatividad, la participación y favorecen la dinámica de clase.

Existen diferentes tipos de imágenes con las que se puede trabajar en el aula: fotos, mapas, obras de arte, dibujos, comics… En cualquier nivel de aprendizaje y en cualquier fase de la unidad didáctica.


Y lo más importante de todo, despiertan la curiosidad de los estudiantes.